La industria de la automoción vive una revolución en todos sus ámbitos gracias a un impulso tecnológico único en la historia. Los avances están provocando cambios incluso en el modo en el que nos comunicamos con nuestros vehículos y en el concepto del entretenimiento a bordo. Tal y como ha ocurrido con los smartphones, los fabricantes aspiran a extender la funcionalidad principal de los vehículos y proporcionar toda una serie de experiencias únicas.
El avance vertiginoso de la tecnología también afecta a los sistemas de infoentretenimiento y esa velocidad amenaza a que muchos vehículos puedan quedar obsoletos en esta asignatura. Por eso, fabricantes como Volvo trabajan junto a las compañías tecnológicas de mayor relevancia para paliar los efectos de esa obsolescencia. Así, sus sistemas se actualizarán en función de las posibilidades, cada vez mayores, que viviremos en nuestro habitáculo.
Alianzas que conectan el coche al futuro
La triple alianza entre Volvo, Intel y Google persigue esta meta común. Para ello, el sector de la automoción tiene que vencer algunos obstáculos que lleva varios años arrastrando. Así lo ve el gerente general del departamento de Soluciones de Transporte de Intel, Ryan Tabrah, que destaca que las compañías especializadas de origen en el desarrollo de software llevan mucha ventaja a los fabricantes de automóviles.
Son capaces de ofrecer soluciones de entretenimiento en el vehículo en sintonía con lo que se vive en otras áreas del entretenimiento en general, y en concreto, en la de los smartphones y dispositivos derivados. Tabrah centra la atención de ese desfase de prestaciones entre estos últimos y los sistemas de infoentretenimiento en las diferencias entre el ciclo de vida de los automóviles y los artículos electrónicos.
Cambiar de teléfono móvil es una decisión que nada tiene que ver con cambiar de coche. Los fabricantes han venido dedicando grandes esfuerzos en igualar prestaciones a través del desarrollo de un softwarepropio. Sin embargo, el ritmo tecnológico hace que las virtudes de este último se desdibujen. La mencionada fusión de intereses de Volvo con Intel y Google trabaja para acabar con ese desfase. Se trata de aunar esfuerzos para dotar a los vehículos de una herramienta fundamental.
Intel se ha comprometido a apoyarse en Android como sistema operativo clave que contribuya a que los fabricantes puedan ofrecer las últimas novedades de infoentretenimiento a los consumidores. Nuestra colaboración con Google y Volvo propiciará que los fabricantes tengan el máximo en el procesado de datos (…) para permitir nuevas experiencias en el vehículo.
Así es cómo define el proyecto en común el vicepresidente corporativo y director del Centro de Tecnología Open Source de Intel, Imad Sousou.
Entretenimiento, seguridad informática y seguridad vial
Las diferencias entre lo que ofrecen, en cuestión de entretenimiento, teléfonos móviles y coches irán reduciéndose en poco tiempo. Los modelos de Volvo están siendo pioneros de esta fusión de intenciones. La puesta a punto de un software en común es solo el germen de lo que depara al coche y al diseño de los sistemas de infoentretenimiento. Esta unión de intereses también refuerza la idea de un sistema operativo menos vulnerable a ataques externos.
Seguridad, tanto informática como vial, constituye una máxima de Volvo. En el caso de la compañía sueca, el concepto de entretenimiento no está reñido con la seguridad. Lo demuestran modelos como el Nuevo Volvo S60. Este monta una pantalla central táctil de 9 pulgadas para facilitar la lectura de información y reducir el hecho de vernos obligados a desplazarnos por los menús que se visualizan en la pantalla.
En la misma línea, Volvo ha cuidado para que la pantalla sea especialmente sensible (puede usarse hasta con guantes) y venga recubierta con un revestimiento antirreflectante. De cara a seguir evitando distracciones y no retirar la atención de la carretera, el Volvo S60 también cuenta con otra pantalla que proyecta su información en el parabrisas.
¿Qué nos depara el futuro del infoentretenimiento a bordo?
El objetivo de Volvo y los sistemas de infoentretenimiento no solo tiene que ver con la seguridad, sino también con la optimización del tiempo que pasamos al volante. Por eso, el fabricante sueco se ha marcado el reto de que cada conductor recupere una semana de tiempo de calidad al añogracias a las innovaciones del interfaz de usuarios Sensus Connect.
El equilibrio entre la oferta de entretenimiento de vehículos y resto de dispositivos electrónicos continuará explorando nuevas fórmulas. El fabricante cuenta con otros proyectos que podrían aflorar en un corto plazo y que, al mismo tiempo, contribuyen a integrar más avances.
Hablamos de la tecnología de realidad virtual. Otra alianza, la de Volvo con la compañía finlandesa Varjo, ha propiciado que por primera vez en la industria de la automoción sea posible conducir un coche a la vez que se opera un sistema de realidad virtual. Esta solución se utiliza, de momento, tan solo por los desarrolladores del fabricante. Les permite, entre otras funciones, probar los últimos avances tecnológicos de un modo virtual (que no por ello irreal) y acelerar los procesos de incorporación de los mismos.
Sin embargo, las posibilidades que presentan estos sistemas para un futuro inmediato pueden traer múltiples beneficios para la conducción. Esto se debe a los prometedores resultados de la combinación de una realidad aumentada y objetos ficticios.
El potencial de infoentretenimiento del Volvo S60
En el Volvo S60 encontramos muchas de las claves de la nueva generación de sistemas de infoentretenimiento capaces de vencer la obsolescencia. La relación entre conductor y vehículo se plasma en una manejabilidad superior de sus pantallas táctiles. La intuición a la hora de operar también la constatamos en un control de voz capaz de reconocer el habla natural. Climatizador, sistema de navegación, sistema multimedia o teléfono pueden utilizarse con sencillos comandos.
El sistema de sonido es otro de los puntos más destacados del Volvo S60. Presenta dos potentes opciones: Premium Sound de Harman Kardon, con 600 vatios y 14 altavoces; y la opción de alta gama Bowers & Wilkins cuyos 15 altavoces alcanzan hasta 1100 vatios.
Es posible disfrutar de todas las posibilidades sonoras de estos sistemas gracias a la sencillez y versatilidad con la que podemos vincular nuestro smartphone al vehículo. El Volvo S60 presenta compatibilidad con Apple CarPlay y también con Android Auto. A la vez, la interfaz Sensus Connect permite gestionar un gran número de apps.
Por su parte, las funciones de control remoto del vehículo se organizan a través de la aplicación Volvo On Call. Mediante esta se pueden realizar diversas tareas en remoto, como activar el climatizador del Volvo S60, encontrar aparcamiento o gestionar citas a través de su función de agenda personal.
La tecnología de Volvo On Call contiene la misma vocación de renovación para combatir los riesgos de que el sistema quede obsoleto. Y es que las funcionalidades del mismo se van actualizando según Volvo ultima nuevas prestaciones y servicios. Es, en el fondo, el inicio de la ruta hacia la integración digital definitiva de los vehículos.